7. Cuidando tus pelotas
Para lavar tus Bolas de Masaje Plyopic después de su uso, simplemente usa jabón y agua tibia y déjalas secar al aire libre.
8. Advertencias importantes
Nuestro contenido educativo no está destinado ni destinado a asesoramiento o tratamiento médico. El caso de cada paciente es único y cada paciente debe seguir las instrucciones específicas de su médico. Analice las opciones de nutrición, medicación y tratamiento con su médico para asegurarse de recibir la atención adecuada para su situación particular. La información contenida en este sitio no reemplaza las instrucciones específicas de su médico.
Consulte a su médico antes de usar este producto y comenzar cualquier ejercicio nuevo para asegurarse de que no interfiera con ningún otro tratamiento en curso. Si tiene alguna condición de salud preexistente que pueda empeorar con el uso de bolas de masaje, lo mejor es consultar a un especialista médico antes de comprar o usar una. Las personas con problemas de movilidad pueden tener dificultades para utilizarlos de forma eficaz y segura. Aquellos con afecciones o enfermedades crónicas como lesiones o laceraciones en la piel, eccema, quemaduras solares o afecciones cutáneas contagiosas, diabetes avanzada, osteoporosis o que estén recibiendo quimioterapia deben consultar a su médico antes de intentar la autoliberación miofascial.
Evite el uso de bolas de masaje pliopicas sobre el sitio de cualquier daño tisular reciente, como un hueso roto, un hematoma o una herida. Se debe tener cuidado con el trabajo profundo en personas con huesos frágiles o quebradizos. Evite el uso de la bola puntiaguda si tiene inflamación aguda, hematomas graves o patología articular. Deben evitarse áreas con problemas orgánicos internos. Si tiene alguna duda consulte a su médico o profesional de la salud.
Los ejercicios deben ser indoloros, dejando los músculos objetivo sintiéndose más ligeros y relajados después. Cualquier aplicación que aborde directamente problemas miofasciales (de tejidos blandos o musculares) (como terapias neuromusculares, de tejido profundo, de puntos gatillo o similares) puede resultar dolorosa al tratar áreas problemáticas; el dolor no proviene del trabajo en sí sino de la patología del tejido. Si tiene dolor grave o intenso debe consultar a su médico o profesional de la salud.